martes, 11 de enero de 2011

El interruptor

Y en el momento mas inesperado, tu interior apaga el interruptor y se escapa por la parte de atrás. El cansancio y el sin sentido llaman a tu puerta con un golpe constante y fuerte.

Volviendo a casa en la oscuridad mas penetrante y con el frió como infinito acompañante, ves reflejada tu sombra... Nada... Solo una cosa...Soledad...Alli entre el congelado y gris asfalto no hay ruidos, solo el silencio de tus pasos navegando por el tiempo.

Te preguntas... pero no te respondes... No sabes que buscar, ni que encontrar...

Pero, antes que tu mirada dibuje la impotencia que sientes, les:

"La vida no se mide por las veces que respiras, sino por aquellos momentos que te dejan sin aliento."

Recapacitas y te das cuenta que no puedes pedirte mas de lo que no puedes dar, que tu interior te echaba de menos y que eres tal cual eres con tus defectos y virtudes, y si alguien no le gusta pues se lamenta porque es tu esencia, lo que te hace único. Vuelves a sentir compañía y regalas disculpas por sentirte solo.

Recuerdas momentos pasados y tu interior vuelve con el mayor sigilo tomando un pequeño fuego y enciende de nuevo el calor de tu corazón.

1 comentario:

  1. 6.000 km no serán los que me impidan "estar" ahí contigo hermano. Apoyándote y, aunque sea con unas palabras, llevándote hacia adelante...

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