lunes, 26 de marzo de 2012

Arriésgate

Deja atrás los miedos y afronta los retos de tu camino. Aunque tus manos tiemblen, cierra los ojos y siente la esperanza de tus sueños. Recuerda la fuerza de tu interior y aparta las dudas de tus pasos. Se fuerte y no llenes todo con preguntas o interrogantes, mas bien arriésgate y sigue el susurro de tu corazón. No dejes pasar las oportunidades, inténtalo.

Cree en ti, porque tu vales, porque sabes que puedes. No tengas miedo por tropezar, por que te levantaras.


Recuerda que estas aquí, preparado y esperando cada minuto para ser luz.

lunes, 12 de marzo de 2012

Y en cada paso

Y en cada paso intentar escuchar corazones.
Y en cada paso intentar sentarme al borde de un banco y dejarme llevar por las palabras de otros labios.
Y en cada paso adentrarme en las historias contadas por otros caminos.
Y en cada paso anotar los sueños de otras miradas.
Y en cada paso llenarme de la esperanza de sonrisas llenas de felicidad.
Y en cada paso compartir lagrimas.
Y en cada paso escribir las aventuras de anécdotas llenas de luz.

Y en cada paso intentar aprender de la luz de los corazones que se cruzan en mi camino.

domingo, 11 de marzo de 2012

Recuerda

Antes de cerrar los ojos y esperar un nueva mañana.

Recuerda guardar cada mirada que te ha regalado el día.
Recuerda llenar tu bitácora de aventuras con las mejores fotos de tu día.
Recuerda escribir todas aquellas palabras que te han llenado el corazón.
Recuerda todos los obstáculos que sobrepasaste.
Recuerda todos los abrazos que te han animado.
Recuerda aquellas lagrimas que te han echo mas fuerte.


Sonrie y cierra los ojos en busca de una nueva aventura.

lunes, 5 de marzo de 2012

Desierto I

Después de una semana de empezar a caminar por las arenas de mi desierto, han retumbado un montón de palabras en mi interior. Ahora bien quisiera resaltar las tres siguiente: servir, aceptar y unión.

Otra vez volví a comprender que servir es aquello que mueve el corazón, aquello que te dibuja una sonrisa en el alma, aquello que te invita a regalar tu luz. Ahora bien, es fácil decirlo pero no hacerlo. No siempre es fácil decir que si y dar una mano a aquel que lo necesita, pero el motor de tu corazón siempre saca fuerzas para seguir iluminando.

Sin embargo, aceptar que estas cansado, que necesitas tiempo para ti, que también tienes limites es muy importante. No vale nada seguir ayudando cuando tu interior suplica ayuda. Acepta, que también necesitas ayuda.

Y cuando gritas voces de ayuda te das cuenta que la unión de luces, que la unión de corazones, te regalan la oportunidad de sentarte y curarte. Es en esa unión de amistad, de fraternidad donde los problemas pierden peso y se pueden vencer.

Sirve para regalar la luz de tu corazón, pero acepta tu cansancio reposando en manos unidas.