Aunque las agujas del reloj avances sin poder detenerlas, hoy me detengo para mirar mi alrededor y decirme a mi mismo....
Quiero aprender a no encasillar me en mis errores, en aceptar que son fallos y que me ayudan a crecer. Que son vida.
Que el cansancio no me lleve consigo cuando no encuentro la solución a un problema.
Que la esperanza no desaparezca cuando niego su existencia porque no soy capaz de seguir avanzando.
Que conseguir mis sueños no son una mera ilusión sino que puedo llegar a alcanzarlos si me lo propongo.
Que soy como soy con mis dones y mis defectos, que sin ninguno de ellos no seria como soy.
Que el amor es el motor del mundo y cada día debo salir con esta palabra dibujada en el corazón.
Que hay que arriesgarse aunque el miedo silencie tu interior.
miércoles, 19 de enero de 2011
martes, 11 de enero de 2011
El interruptor
Y en el momento mas inesperado, tu interior apaga el interruptor y se escapa por la parte de atrás. El cansancio y el sin sentido llaman a tu puerta con un golpe constante y fuerte.
Volviendo a casa en la oscuridad mas penetrante y con el frió como infinito acompañante, ves reflejada tu sombra... Nada... Solo una cosa...Soledad...Alli entre el congelado y gris asfalto no hay ruidos, solo el silencio de tus pasos navegando por el tiempo.
Te preguntas... pero no te respondes... No sabes que buscar, ni que encontrar...
Pero, antes que tu mirada dibuje la impotencia que sientes, les:
"La vida no se mide por las veces que respiras, sino por aquellos momentos que te dejan sin aliento."
Recapacitas y te das cuenta que no puedes pedirte mas de lo que no puedes dar, que tu interior te echaba de menos y que eres tal cual eres con tus defectos y virtudes, y si alguien no le gusta pues se lamenta porque es tu esencia, lo que te hace único. Vuelves a sentir compañía y regalas disculpas por sentirte solo.
Recuerdas momentos pasados y tu interior vuelve con el mayor sigilo tomando un pequeño fuego y enciende de nuevo el calor de tu corazón.
Volviendo a casa en la oscuridad mas penetrante y con el frió como infinito acompañante, ves reflejada tu sombra... Nada... Solo una cosa...Soledad...Alli entre el congelado y gris asfalto no hay ruidos, solo el silencio de tus pasos navegando por el tiempo.
Te preguntas... pero no te respondes... No sabes que buscar, ni que encontrar...
Pero, antes que tu mirada dibuje la impotencia que sientes, les:
"La vida no se mide por las veces que respiras, sino por aquellos momentos que te dejan sin aliento."
Recapacitas y te das cuenta que no puedes pedirte mas de lo que no puedes dar, que tu interior te echaba de menos y que eres tal cual eres con tus defectos y virtudes, y si alguien no le gusta pues se lamenta porque es tu esencia, lo que te hace único. Vuelves a sentir compañía y regalas disculpas por sentirte solo.
Recuerdas momentos pasados y tu interior vuelve con el mayor sigilo tomando un pequeño fuego y enciende de nuevo el calor de tu corazón.
viernes, 7 de enero de 2011
Idas
El tiempo sigue su rumbo decisivo y no deja escapar un mero paso. Maletas han llegado y otras han partido de vuelta a encontrarse con un viejo horizonte repintado. Entre el frió y la nieve expectante por colarse entre las nubes, muchas miradas recuerdan antiguas aventuras y momentos.
No sabemos si volveremos a ver aquellas miradas que fueron nuestra mas fraterna compañía en este pequeño sitio. Tampoco podemos deducir el tiempo en que volvamos abrazar aquellos personas que nos han dibujado un rincón en el corazón. Ni sabremos si nos encontraremos en otro sitio muy lejos de aquí.
Pero, lo vivido, no se borra. Aquello que nuestro corazón ha guardado no podrá olvidarse. La huella que han dejado aquellas personas no se erosiona, ni se esfuma...siempre quedara para volver a recordar cada momento y dibujar una sonrisa por lo vivido.
Las fotos mas lindas no están en un cámara sino en tu tu interior guardadas con un lazo de oro.
No sabemos si volveremos a ver aquellas miradas que fueron nuestra mas fraterna compañía en este pequeño sitio. Tampoco podemos deducir el tiempo en que volvamos abrazar aquellos personas que nos han dibujado un rincón en el corazón. Ni sabremos si nos encontraremos en otro sitio muy lejos de aquí.
Pero, lo vivido, no se borra. Aquello que nuestro corazón ha guardado no podrá olvidarse. La huella que han dejado aquellas personas no se erosiona, ni se esfuma...siempre quedara para volver a recordar cada momento y dibujar una sonrisa por lo vivido.
Las fotos mas lindas no están en un cámara sino en tu tu interior guardadas con un lazo de oro.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)